Santa Maria con su ejemplo nos enseña a meditar en los designios de Dios para seguir así un proyecto de vida en el amor y misericordia, unidos al corazón a Jesús como nuestra madre celestial.
Medita entonces sobre cómo esta tu corazón dando gracias a Dios en todo y por todo, y siempre, antes de tomar cualquier decisión, medita en cuál es la voluntad de Dios.
Aunque no entendamos él porque de muchas situaciones que tenemos que vivir, lo que debemos saber es que así pasa porque es la voluntad de Dios.
Vive todos los días de tu vida de acuerdo como nos enseña Jesus siguiendo el ejemplo de Fe de Maria.
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Si te animas a seguir el ejemplo de María en el Evangelio de Lucas (2,16-21) y sientes que necesitas un cambio real, prueba estos tres pasos:
- Contempla: Dedica un momento a meditar en tu interior, como hizo María, dejando que la voz de Dios te hable al corazón.
- Confía: Acepta que no siempre vas a entenderlo todo; abraza la incertidumbre sabiendo que Dios guía tu camino incluso en la duda.
- Actúa con coherencia: Haz que tus decisiones reflejen la enseñanza de Jesús, con amor y entrega a la voluntad divina.
Vivir de esta manera te ayudará a florecer en la verdadera prosperidad, preparándote para la plenitud en esta vida y para la vida eterna. ¡Ánimo!
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Lectura del santo evangelio según san Lucas (2,16-21):
En aquel tiempo, los pastores fueron corriendo hacia Belén y encontraron a María y a José, y al niño acostado en el pesebre. Al verlo, contaron lo que se les había dicho de aquel niño.
Todos los que lo oían se admiraban de lo que les habían dicho los pastores. María, por su parte, conservaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón.
Y se volvieron los pastores dando gloria y alabanza a Dios por todo lo que habían oído y visto, conforme a lo que se les había dicho.
Cuando se cumplieron los ocho días para circuncidar al niño, le pusieron por nombre Jesús, como lo había llamado el ángel antes de su concepción.
Palabra del Señor.