Evangelio de Marcos 8,14-21: Jesús nos enseña que es Dios quien provee

En el Evangelio de Marcos, encontramos un pasaje revelador (Marcos 8,14-21) que nos invita a reflexionar sobre la importancia de confiar en Dios como nuestro proveedor supremo. Jesús, en su sabiduría infinita, nos enseña que, a pesar de las decisiones inciertas de los hombres, es el Todopoderoso quien garantiza nuestro sustento.

En este pasaje, vemos cómo Jesús advierte a sus discípulos sobre la levadura de los fariseos y de Herodes, simbolizando las influencias negativas que pueden afectar nuestra fe. La lección aquí va más allá de la preocupación por el pan cotidiano; es una llamada a depositar nuestra confianza en Dios y a trabajar para Él sin inquietarnos por las decisiones terrenales.

Viviendo en Amor y Cumpliendo la Palabra de Dios

La misión en este mundo es seguir nuestros anhelos, pero siempre en concordancia con la palabra de Dios.

Quien sigue a Jesús, encontrará sustento. La clave está en entender que el sustento no solo depende de nuestro esfuerzo, sino de nuestra fe en Dios, el verdadero proveedor.

En Santiago 1:12-18 se nos recuerda que, al superar las pruebas con paciencia y fe, recibimos la corona de lo prometido. Esto refuerza la idea de que el sustento viene como resultado de nuestra relación con Dios y nuestra resistencia en las pruebas.

No Caigas en Tentación, Sigue con Fe

La tentación puede presentarse en diversas formas, pero debemos resistirla con fe. Recordemos las palabras de Jesús sobre el mundo espiritual que influye en lo material: «Como es arriba, es abajo». Este recordatorio nos anima a comprender cómo funciona la vida en amor, a oír y ver más allá de lo evidente.

La Confianza en Dios, Fuente de Vida y Sustento

En resumen, la enseñanza de Jesús en Marcos 8,14-21 nos insta a confiar en Dios como nuestro proveedor. Al vivir en amor y cumplir la palabra de Dios, encontramos sustento en medio de las pruebas. No caigamos en la tentación de preocuparnos por las decisiones terrenales, sino sigamos con fe, recordando que todo beneficio perfecto viene de lo alto.

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